Una revolucion casera

tiene sueños, se aburre, siente el tedio, el hastío, la apatía, melancolia, angustia vital, sopor.... cualquier cambio se convierte en rutina y costumbre...

"En vano busqué, en el mar sin fondo de los placeres, así como en los abismos del conocimiento, un lugar en el que echar el ancla. Sentí la fuerza apenas resistible con la que un placer tiende la mano al otro; experimenté esa suerte de incierta exaltación que el placer puede provocar; al igual que viví el tedio, el profundo desgarro que lo sigue. Saboreé los frutos del conocimiento y, con no poca frecuencia, disfruté igualmente del gozo de probar su dulzura. Pero no solía durar este placer más que el instante mismo del conocimiento, ni solía dejar en mí una huella profunda. Se diría que, más que beber de las fuentes de la sabiduría hubiese caído en ellas." Kierkegaard 1835.

lunes, 27 de junio de 2011

Un regalo.... Eterno retoño

Carga a la espalda,
casi confundido con él,
un niño que mira
hacia el cielo.

Parece que anda
y vuela en realidad
con unas alas toscas
que le rozan el pelo.

Sostiene los labios estirados
como anunciando una sonrisa
y una lágrima se sostiene
tras sus párpados estriados.

Ése es él, el alado,
acarreando sin prisa,
y con gesto de saberlo
ya casi todo,
una vida entera.

Pero, ¿por qué sufre entonces?
¿cómo puede extinguirse su llanto?

Carga modelos de construcción
para pasearlos por las ferias
y apenas piensa si ganará
o perderá su parte alícuota
en la inversión común.

Parece pensar en los beneficios
y, sin embargo, las aristas
de su rostro reflejan el pánico
a ganar algo no suyo
y a perder lo que le da alas
con que cargar a la espalda,
casi confundido con él,
un niño que mira hacia el cielo.


Sergio Aguilar

1 comentario:

  1. me llega mucho este poema, parece que hable de un titiritero ambulante, petons

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